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Serpenteando tu costado no sé si aun duermo,
me escurro en rincones donde no llega el viento.
La luz de la ventana sobre nosotros se recuesta,
la mañana destella y se invita a nuestra siesta.
Tu espíritu es el soplo del dueño del tiempo,
el mío es susurro y de él es mi aliento.
Te busca mi boca y la tuya le contesta
y los sueños de ojos cerrados,
una a la otra se cuentan.
Recorro tu regazo y en tu pecho me detengo
un par de manos blancas buscan su dueño.
Dos ramos de dedos pasean traviesos,
y las sombras en la cama dibujan un cuento.
Tu media sonrisa me hace cosquillas,
te despierto con dos besos en cada mejilla.
Te veo y me ves y en tus ojos me veo,
son los espejos más bellos y conocen mis deseos.
Tus brazos me atrapan me refugio en tu cuello
y desde el alma te regalo un suave ronroneo.
Somos libélulas jugando en invierno,
ahora estamos solos suspendidos en lo eterno.
Derrite el calor mi almíbar con tu miel
es alquimia de azúcar mi piel y tu piel.
Mis muslos te cuentan cuánto te extraño.
un pajarito nos silba desde un árbol cercano.
Mis dedos acarician de tu pelo la seda,
nos mecemos entre almohadas
mientras sube la marea.
Serpenteando tu costado no sé si aun duermo,
me escurro en rincones donde no llega el viento.
La luz de la ventana sobre nosotros se recuesta,
la mañana destella y se invita a nuestra siesta.
Tu espíritu es el soplo del dueño del tiempo,
el mío es susurro y de él es mi aliento.
Te busca mi boca y la tuya le contesta
y los sueños de ojos cerrados,
una a la otra se cuentan.
Recorro tu regazo y en tu pecho me detengo
un par de manos blancas buscan su dueño.
Dos ramos de dedos pasean traviesos,
y las sombras en la cama dibujan un cuento.
Tu media sonrisa me hace cosquillas,
te despierto con dos besos en cada mejilla.
Te veo y me ves y en tus ojos me veo,
son los espejos más bellos y conocen mis deseos.
Tus brazos me atrapan me refugio en tu cuello
y desde el alma te regalo un suave ronroneo.
Somos libélulas jugando en invierno,
ahora estamos solos suspendidos en lo eterno.
Derrite el calor mi almíbar con tu miel
es alquimia de azúcar mi piel y tu piel.
Mis muslos te cuentan cuánto te extraño.
un pajarito nos silba desde un árbol cercano.
Mis dedos acarician de tu pelo la seda,
nos mecemos entre almohadas
mientras sube la marea.
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mientras sube la marea.
para F.
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fotos de la musa por chch
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4 comentarios:
Hola que bonito te quedo, lleno de sentimiento y al mismo tiempo tiene cierta inocencia y pureza.
Moshi Moshi, rato sin saber de ti, que bueno que hayas vuelto a escribir algo.
Muy inspirador, soñador y romántico. Veo que ha cambiado el estilo de prosa, ahora por pequeñas frases.
Abrazos amiga!
betooooooo!!
im back!! dulce pero de vuelta!!
lee!!
muchas gracias...
si y sigo mutando!!
Y eso que nunca me ha gustado del todo la poesía, se me hace algo difícil de entender a veces, pero ésta es genial, en serio *_*
Me encanta tu blog, iré pasándome de tanto en tanto!
(Y échale un vistazo al mío si tienes un ratejo)
Un placer!
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